En un esfuerzo por impulsar el talento emergente en el ámbito de la enología, la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile participó el pasado 15 de diciembre en el Concurso de Innovación Enológica, organizado por Viña VIK. Este proyecto colaborativo busca descubrir y potenciar la carrera de futuros enólogos nacionales, estableciendo una alianza con las áreas de enología de tres prestigiosas universidades chilenas: Universidad de Chile, Pontificia Universidad Católica y Universidad de Talca.
Nuestra Facultad estuvo representada por los alumnos del Magíster en Enología y Vitivinicultura; Cristián Fernández, Macarena Vásquez, Tamara Quiñones, Vanessa Bravo, Tomás Correa, Ignacio Aguirre, Gerardo Valladares y Katherine Cortés; quienes compitieron junto a 18 alumnos de las otras casas de estudio superiores.
Después de seis meses de guarda, período común para todos los participantes, un exigente jurado nacional e internacional llevó a cabo una curaduría en diciembre, determinando los tres primeros lugares. En esta competencia, Katherine Cortés Araya, destacó al obtener el tercer lugar.
Nuevas Oportunidades, enfoques y responsabilidades son parte de los aspectos positivos adquiridos por Katherine en esta nueva experiencia profesional. “Significó poner en práctica lo que he aprendido y por sobre todo poner mi sello en la producción de un vino. Fue una actividad verdaderamente innovadora, que permitió como futuros enólogos ser parte del proceso y entregar nuestros propios estilos. Sinceramente espero sigan dándose este tipo de instancias y seguir viendo las siguientes ediciones”, explicó la alumna del Magister de Enología.
En esta edición, Viña VIK abrió las puertas de su bodega y procesos a la comunidad universitaria, permitiendo a los estudiantes seleccionados sumergirse en el mundo de la vinificación con la guía del experimentado equipo enológico liderado por Cristián Vallejo. A través de esta colaboración, se seleccionaron los 10 mejores alumnos de cada universidad, quienes tuvieron acceso al expertise, la infraestructura y los equipos de apoyo de la viña.
La singularidad de este concurso radicó en la posibilidad que cada estudiante tuvo de crear sus propias mezclas, definiendo los porcentajes con tres cepas de vinos VIK. Además, los participantes aportaron su toque personal al producto final al determinar el porcentaje de "Barroir" (Barrica y Terroir), un concepto único de VIK que enfatiza las características singulares de las barricas de roble francés tostadas con robles del propio terroir en Millahue, con más de un siglo de antigüedad. Este proceso otorga al vino mayor tensión, dinamismo y elegancia.
En palabras del académico Elias Obreque, esta actividad no solo visibilizó las habilidades y aptitudes de los estudiantes de Enología, sino que también proporcionó “una oportunidad para que los futuros profesionales del vino se relacionen con colegas de otras universidades y profundizaran en la realidad enológica del país”. Obreque además agradeció a Viña VIK por su interés en contribuir al desarrollo de los profesionales del vino.
El concurso de innovación en enología no solo permitió forjar una alianza sin precedentes entre la academia y la industria vitivinícola, sino que también ofreció a los estudiantes la oportunidad única de una pasantía de trabajo en Viña VIK, marcando un hito en la formación y proyección de los futuros enólogos chilenos.
Galería de fotos
Ingrid Court V. - Periodista FCA