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Profesor Guillermo García: adiós a un maestro

Profesor Guillermo García: adiós a un maestro

Conocido como uno de los precursores de la formación académica en ganadería Ovina, el profesor Guillermo García falleció el pasado 6 de marzo a días de cumplir 93 años, dejando un importante legado en estudiantes y amistades por su profesionalismo, dedicación y especialidad en su disciplina.

Corría el año 1951 cuando Guillermo García Díaz se titula de Ingeniero Agrónomo de la Universidad de Chile y su carrera como académico no se dejó esperar. En 1954 ya estaba frente a un grupo de estudiantes dictando clases, para luego quedar a cargo en 1957 de la cátedra de Producción Ovina y Caprina.

“En la década de los años 60, el profesor García ya era un importante referente en la raza Merino”, destacó el profesor Giorgio Castellaro, académico de la Facultad, quien fue su ayudante y más tarde heredó su cátedra llamada actualmente Producción de Rumiantes Menores.

Entre los años 1971 y 1976, el profesor García vivió en Venezuela, donde pudo perfeccionar su expertise en la raza ovina Pelibuey. Cuando volvió a Chile retomó su trabajo en la docencia compartiendo sus saberes no solo en la Universidad de Chile, sino que en la Universidad Católica de Valparaíso o en la Universidad de Concepción, por ejemplo.

En nuestra Facultad, el profesor García dictó clases a destacados profesionales que también se convirtieron en académicos, como Francisco Vieira y Nicolo Gligo, que hicieron su Memoria de Título con él, o el Decano Roberto Neira, la profesora Susana Muñoz, y el ex Decano Mario Silva, entre muchos otros nombres.

“A mí me gustaría destacar sus características como persona de gran calidad humana, muy cercano a los estudiantes, con sus colegas, y por sobretodo destaco su consideración hacia los demás, con esta actitud supo ganarse el respeto de los que fueron sus estudiantes y colegas. Fue un profesor muy querido y muy respetado, varios de sus alumnos memorantes y que fueron ayudantes en la cátedra de Producción Ovina y Caprina me han manifestado como común denominador, que además de haber sido muy buen profesor, el que los haya apoyado en su desarrollo profesional”, afirmó la profesora Muñoz.

Además de formar profesionales en el área ovina, el profesor García también se destacaba por las asesorías que realizaba a productores ganaderos de la costa de la Zona Central y Sur, así como también en Aysén y Magallanes, donde fue asesor de las grandes estancias en las cuales desarrolló su acción de selección por finura de Lana en raza Cortiedale.

“Trabajó mucho tiempo en el laboratorio de lanas del ministerio de agricultura y conjuntamente era profesor de ovinos de la Escuela de Agronomía en esos tiempos en su casa central de Quinta Normal. Desarrollo una inmensa actividad en los rebaños de ovinos en las zonas mencionadas como especialista y mejorando las razas a través de selección e importando carneros”, señaló el profesor Héctor Manterola, colega y amigo del profesor García y su sucesor en la dirección del Departamento de Producción Animal.

“Muy respetado en el ambiente nacional e internacional por sus pares. Sus aportes al país a través de su larga trayectoria fueron oportunos y acertados. Pero lo que deseo destacar en esta ocasión son sus grandes valores como persona. Fue un hombre íntegro con un gran carisma para los estudiantes, todos los recuerdan con un gran cariño porque además de entregar conocimientos generaba un espacio vivencial que hacía a los estudiantes sentirse entendidos. Aspecto tan importante en un profesor universitario entregar afecto a sus estudiantes. Don Guillermo era un líder, si bien los estudiantes podían seleccionar otras áreas de interés, él dejaba tatuado en los jóvenes el comportamiento de un buen profesional para con la sociedad”, afirmó el ex Decano Silva, enfatizando en que “realmente profesó la actividad de educador universitaria”.

Así mismo lo recuerda el profesor Castellaro, agradecido de haber obtenido sus competencias en el área a partir de las clases del profesor García. “Él hacía mucho trabajo de campo, de terreno. Todos los conocimientos en la producción de ovejas y lana los traspasaba a través de la práctica. Nos enseñó a trabajar en el campo, con los productores. De seguro que, si uno les pregunta a campesinos mayores, van a recordar a Don Guillermo”.

En 1985 el Colegio de Ingenieros Agrónomos lo premia por su destacada actividad gremial y al año siguiente, la Universidad de Chile le otorga la categoría de Profesor Titular en la carrera académica. Fue director del Departamento de Producción Animal, con varias reelecciones, entre 1986 y 1993, hasta que asume como director de Planificación de la Facultad.

El profesor García participó en destacadas publicaciones que son referentes obligados, consultados hasta el día de hoy, para nuevos estudios y Tesis de Grado. Títulos como "Mejoramiento de la producción ovina extensiva en regiones semiáridas”, 1974; “Perspectivas de producción ovina en Chile”, 1987; “Lanimetría y producción de lana. - 3a ed. ampliada y actualizada: [apuntes de Producción Ovina y Caprina]”, 1996; “Manejo de los ovinos: [Apuntes de Producción Ovina y Caprina]”, 1998.

“Atesoro en mi oficina una publicación del profesor del año 61 sobre la evaluación de las razas Merino Precoz y Suffolk que no se habían estudiado antes. Él dictó pauta sobre cómo mejorar el manejo de su bienestar y de su productividad. Y otro libro que me regaló que hablaba de la historia de la raza merino en España”, comentó el profesor Castellaro.

Sin duda sus estudiantes y colegas atesoran también la experiencia de haber conocido al profesor García y haber recibido sus enseñanzas. Un académico metódico, serio, muy disciplinado, pero a la vez muy preocupado de transmitir sus conocimientos y que sus alumnas y alumnos aprendiesen las lecciones, al punto de corregir incluso los errores de ortografía de los informes o pruebas que le entregaban escritos a mano.

El año 2002 y a la edad de 74 años se jubila, pero sigue dictando clases hasta el año siguiente, sin desligarse de su participación en diferentes actividades de Extensión de la Facultad hasta hace pocos años atrás. A sus 93 años y tras una vida dedicada a la docencia, fallece en compañía de su familia.

La comunidad Antumapu y, especialmente, la Facultad de Ciencias Agronómicas lamenta profundamente su partida y agradece todos los años de dedicación y trabajo para formar profesionales de excelencia en la Ingeniería Agronómica. Hasta siempre maestro.

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