El acuerdo firmado entre las unidades académicas de la Universidad de Chile y la Fundación Artesanías Chile tienen como objetivo potenciar el trabajo que realizan artesanos del Valle del Itata, ubicado al oeste de la Región de Ñuble que comprende las comunas de San Nicolás, Portezuelo, Ninhue, Trehuaco, Quirihue, Cobquecura, Coelemu, Ranquil y Quillón.
En esta zona, de agricultura tradicional, las familias campesinas aún producen artesanía de paja trenzada de trigo, la cual persiste en la zona gracias a que los agricultores han sabido mantener las variedades locales de trigo específicas para la elaboración de las trenzas de paja. Entre estas artesanías destacan las “cuelchas” que son las trenzas de paja de trigo elaboradas por colchanderas y colchanderos ubicados principalmente en Trehuaco, Ninhue y Quirihue. Junto con las “chupallas”, sombrero típico del huaso chileno, elaboradas por los chupalleros de Ninhue.
Durante el año pasado, las Chupallas de Ninhue lograron la Denominación de Origen, un sello oficial que implica un reconocimiento de que el sombrero de huaso es propio de los artesanos de dicha zona, dando así un valor patrimonial a la labor que realizan históricamente generaciones de artesanos. En este proceso estuvo fuertemente involucrada la Universidad de Chile.
El año 2016, la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, a través de la académica Dra. Paola Silva, se adjudicó un proyecto financiado por la Fundación para la Innovación Agraria del Ministerio de Agricultura, FIA, denominado “Innovación en la cadena de valor: Chupallas de Ninhue, mediante el rescate de tradiciones, oficios y variedades locales de trigo para la fabricación de cuelchas”. Desde sus inicios, también participó la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile (FAU), a través de la académica del Departamento de Diseño de la FAU, profesora Dra. Paola de la Sotta, siendo la responsable de los talleres de exploración práctica para el desarrollo de nuevos productos, que buscaban además acercar la identidad local y materiales vinculados a la tradición de la zona.
Un largo camino para posicionar nuestros productos patrimoniales
Han pasado tres años y junto con lograr la Denominación de Origen, la labor ha crecido y se ha profesionalizado, sin perder por ello su carácter campesino y tradicional. En este contexto, el 12 de junio pasado, comenzaron los cursos de capacitación de las artesanas colchanderas del Valle del Itata, encabezada por la Fundación Artesanías de Chile, gracias al convenio firmado entre el Decano Roberto Neira (Cs. Agronómicas), el Decano Manuel Amaya (FAU) y la Directora Ejecutiva de la Fundación, Claudia Hurtado.
« El convenio permititrá dar continuidad al trabajo que hemos realizado en los ùltimos años especialmente con las Colchanderas del Itata. La Fundaciòn Artesanías de Chile va a trabajar con el grupo que nosotros estuvimos capacitando y le darán continuidad no sólo en diseño, comercialización y organización sino que también, dará sustentabilidad al trabajo realizado, porque la Fundación comercializa también los productos de los artesanos », sostuvo la Dra. Paola Silva.
Es así como la Fundación Artesanías de Chile continuará este trabajo a través de capacitaciones financiadas por la Subsecretaría del Trabajo a través del programa “Mejora a la empleabilidad de artesanos tradicionales en zonas rurales”, cuyo fin es mejorar las posibilidades de comercialización de artesanos tradicionales de todo el país. Esto, en sesiones donde se les entregan herramientas que les permiten desarrollarse como creadores de productos finales con altos estándares de calidad.
El convenio firmado por Fundación Artesanías de Chile con la Universidad de Chile permitirá dar continuidad a un trabajo de investigación encabezado desde el año 2016 por las profesoras Paola Silva y Paola de la Sotta. Tras advertir la invisibilidad en la que se encontraban las artesanas de la zona del Valle del Itata, decidieron poner en valor la cuelcha que tejían para el desarrollo de las chupallas, que hasta ese momento era utilizado sólo como un insumo, ya que ellas no terminaban haciendo el producto final. Así, el trabajo hecho por ambas profesoras consistió en guiar a las artesanas para desarrollar nuevos productos terminados.
El trabajo que ha realizado la Universidad de Chile ha consistido no sólo en poner en valor la materia prima utilizada por los chupalleros, si no también en visibilizar la cadena de producción completa, invitando a las artesanas colchanderas a generar nuevos productos para mejorar sus posibilidades de comercialización.
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Dirección de Extensión - Facultad de Ciencias Agronómicas / Roxana Alvarado - Periodista Campus Sur
